Cuando queremos vender una propiedad, es bastante común que recurramos a un intermediario que nos facilite el proceso, como es el caso de las agencias inmobiliarias. No obstante, es en este momento cuando nos surgen dudas como quién se encarga de pagar la comisión inmobiliaria. ¿Es el comprador o es el vendedor? Te resolvemos todas las dudas en este nuevo artículo.
¿Qué es la comisión inmobiliaria?
Se conoce como comisión inmobiliaria a la cantidad de dinero que una agencia cobra por sus servicios en concepto de intermediación. Dicho de otra forma, es la cantidad de dinero que deberemos pagar a un intermediario por gestionar la venta o el alquiler de nuestro inmueble. Como podremos ver más adelante, las comisiones no están reguladas por la ley, por lo que deberás prestar especial atención a la firma del contrato de intermediación.
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Cómo saber las comisiones de las inmobiliarias
Como acabamos de especificar, las comisiones inmobiliarias no están reguladas por ninguna ley. No obstante, todas y cada una de ellas están obligadas a tener un contrato por escrito con toda la relación de costes en cuanto a sus servicios. Por tanto, deberemos consultar dicho contrato para saber el coste que nos supondrá trabajar con una u otra inmobiliaria. Otra opción que tenemos es la de preguntar directamente al comercial que nos esté atendiendo. Este nos informará del coste de sus servicios así como los costes derivados de la venta de la propiedad.
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¿Cuánto cobra una inmobiliaria?
Aunque no existe un precio exacto, sí que podemos determinar un precio medio para que te hagas una idea sobre el coste final. Entre un 3% y un 7%: usualmente es el porcentaje de comisión que deberemos pagar para vender una vivienda con una inmobiliaria (entre el 2% y el 5% es lo más común). No obstante, en aquellos casos en los que sea más difícil la venta la comisión subirá y, por lo contrario, será más baja en las zonas de alta demanda. Debes tener en cuenta que existen otros tipos de comisiones en función de ciertas características adicionales, como podemos ver a continuación:
- Entre 4.000 y 8.000€ si escogemos una tarifa de pago a la venta de una agencia online, es decir, cuando pagamos con la firma de las arras.
- Entre 1.000 y 2.000€ si optamos por una tarifa prepago de una inmobiliaria digital.
También debes tener en cuenta que algunas agencias inmobiliarias cobran un porcentaje adicional de comisión, que suele rondar el 3%.
Quién paga la comisión inmobiliaria
Usualmente suele ser el vendedor quien se encarga de pagar la comisión inmobiliaria por la venta de una vivienda. No obstante, hay algunas situaciones en las que en las que el comprador debe hacerse cargo de ciertos servicios extra, cuando se trata de zonas VIP o propiedades de alto standing. Otra práctica habitual es que en algunas zonas se cargue una comisión tanto al comprador como al vendedor de la propiedad.
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¿Cuándo hay que pagar la comisión inmobiliaria?
En función de la agencia inmobiliaria que escojas para vender tu propiedad, deberás pagar la comisión en un momento u otro. En las inmobiliarias tradicionales se suele cobrar la comisión cuando se firma la escritura de la compraventa ante notario. No obstante, existen agencias que cobran el 50% de dicha comisión cuando se procede a la firma de arras y el 50% restante en la firma de la escritura. Cuando se trata de inmobiliarias online, el momento del pago dependerá de la tarifa que hayas contratado, pudiendo ser de prepago o pospago.
Servicios que incluye la comisión inmobiliaria
Cuando pagamos la comisión inmobiliaria, existen diferentes servicios que se incluyen en la misma, siendo generalmente los que siguen a continuación:
- Valoración de la vivienda: la agencia inmobiliaria se encargará de valorar la vivienda para escoger el precio de venta y publicarlo en los diferentes portales de los que dispone.
- Marketing: otro de los aspectos que se incluyen dentro de la comisión inmobiliaria son todos aquellos recursos destinados al marketing para promocionar la venta de la propiedad.
- Visitas: como es lógico, dentro del precio de la comisión se incluyen las llamadas y la organización de visitas que se realizarán en la vivienda, hasta encontrar un comprador potencial. En función del contrato que establezcamos con la inmobiliaria, seremos nosotros o ellos quienes recibiremos a los inquilinos en la propiedad.
- Negociación: otra de las obligaciones de las agencias inmobiliarias es la negociación para conseguir las mejores condiciones de venta.
- Documentación: esta es seguramente una de las partes que hacen que nos decidamos a optar por contratar una agencia inmobiliaria para gestionar la compraventa de una propiedad. Cuando optamos por contar con dicha agencia, esta se encargará de gestionar todo el papeleo y documentación necesaria para poder llevar a cabo los trámites necesarios.
- Redacción del contrato de arras y preparación de la venta: finalmente, la agencia inmobiliaria también se encargará de redactar el contrato de arras y enviarlo a la notaría para preparar la escritura de la compraventa.
Negociación de las comisiones inmobiliarias
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Si has llegado hasta aquí es porque probablemente deseas contar con una agencia inmobiliaria para que actúe como intermediaria para vender tu propiedad. De ser así, es necesario que sepas que puedes negociar con la misma para conseguir las mejores condiciones, es decir, la mínima comisión posible:
- Contrato de venta con exclusividad: si nos proponen un contrato de exclusividad podemos aceptarlo únicamente en los casos en los que nos cobren una comisión más baja.
- Bajar el precio de venta: si durante el proceso la agencia sugiere bajar el precio de venta de la propiedad, tendrás derecho de negociar también una bajada de comisión.
- Zona con alta demanda: usualmente las zonas con alta demanda son aquellas en las que las propiedades se venden de forma fácil. Puedes usar esta argumentación para intentar que baje la comisión.
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